jueves, 3 de junio de 2010

El regalo de cumpleños

La historia que a continuación relato sucedió como resultado de festejarme mi propio cumpleaños regalándome para esta ocasión la compañía de una scort.
Pues bien para celebrar mi cumpleaños decidí regalarme a una acompañante y para ello busqué en Internet una agencia y elegí a una de las chicas de mas alto nivel, pues la ocasión así lo ameritaba. Ya anteriormente había contratado chicas de la misma agencia y con ellas había hecho realidad varias fantasías: como hacerlo con una mujer de color o con una chica vestida de colegiala (uniforme verdadero de secundaria). En esa ocasión fue una chica bajita y muy delgada, por supuesto mayor de edad, un relato que en otra ocasión se las contare.
En esta ocasión quería tener a una chica de mayor nivel y que fuera por lo menos tan alta como yo, ella se hace llamar Loretta, edecán de eventos deportivos y acompañante, tiene el cabello largo, negro, su piel es clara, casi blanca, piernas largas y torneadas, una figura como si fuera muñeca de caricatura japonesa y un rostro hermoso en especial esos ojos que te pueden hacer palidecer si así lo desea.
Fue un fin de semana que salí a un curso que terminaría el día sábado y al cual solo asistí el jueves y viernes, hice la cita para el viernes en la noche para darme tiempo de estar listo para la ocasión, me hospede en el hotel de costumbre y por la tarde me dedique a relajarme viendo la televisión, llegó la hora de la cita y puntual como suele ser la agencia tocó a la puerta de mi habitación.
*Hola, soy Loretta y estoy a tus ordenes, tengo entendido que solicitaste mis servicios por dos horas, pero si quieres modificar tu pedido estas a tiempo de hacerlo. –Terminó con una linda sonrisa-
No podía creer lo que estaba viendo frente a mi, era un sueño de mujer, de aproximadamente 23 años con la misma estatura que yo, vestía justo como lo había solicitado, una vestido muy corto y entallado, medias con tacones altos que la hacían ver un poco mas alta que yo.
No podía dejar de mirarla, sorprendido ante tanta belleza.
*A perdón- dijo- también tengo el liguero y tanga que pediste- mientras levantaba su vestido un poco por el costado de la pierna- sonrió nuevamente-
En ese momento decidí que ese manjar valía la pena el gasto:
+¿Y cuanto me cuesta tus servicios hasta las 2 de la madrugada?
*No se si pueda, sabes solo trabajo hasta las 11:30, sabes lo hago para poder pagar mis estudios
+Claro, ¿pero que no es fin de semana?, se vale llegar tarde a casa los días de antro ¿o no es así?
*Tienes razón, déjame hacer unas llamadas- Tomo su celular e hizo un par de llamadas y envió algunos mensajes-
*Esta bien todo arreglado
Después de acordar el costo del servicio y el tiempo pasamos a la habitación, le pedí que tomara haciendo en la pequeña sala y se pusiera cómoda, encendí la televisión de nuevo y ordene algunas cosas para cenar, ella se acerco a mi y comenzó a acariciarme.
*Y bien ¿como quieres hacerlo corazón?
+Espera no te preocupes por eso, acompáñame a cenar, que para lo demás tenemos toda la noche ¿no crees?
*Ok entonces cuéntame algo de ti
Le conté algunas cosas sobre mi, el trabajo y la cotidianeidad, creo que todo esto sirvió para romper un poco el hielo.
Charlamos durante cerca de una hora mientras tomábamos la cena y veíamos la televisión, me contó de cómo fue que ingreso a esta agencia de acompañante y que como las demás chicas de su categoría habían empezado como edecanes y demostradoras, pero que como acompañante podía obtener mas y con mayor discreción, me contó que estudiaba una carrera en una de las mejores universidades de el estado y que era muy caro pagarla, obviamente omitió su nombre verdadero y la carrera que estudia, mientras esto sucedía comencé a acariciar sus hombros y darle un suave masaje, sin darse cuenta entre platicas se fue soltando un poco mas y se notaba ya bastante mas relajada,
+entonces ¿hoy te toco evento como edecán?
*si, fue un día pesado, valió la pena pero estoy agotada.
+me imagino, debes tener adoloridos los pies
Me senté sobre un pequeño taburete frente a ella y con una seña le pedí que me diera sus pies, así lo hiso, quite esos tacones altos que la hacían lucir aun mas hermosa y resaltaban sus piernas, le di un rico masaje en los pies mientras ella me contaba las anécdotas mas increíbles en el mundo de las edecanes, para ese entonces parecíamos ya amigos que residen se veían después de mucho tiempo
*oye, pero si el servicio lo pagas tu y pareciera que yo soy quien esta siendo festejada
le pedí que nos fuéramos a la cama, nos recostamos y la abrase por la espalda acariciándola a todo lo largo, mientras que besaba suavemente sus hombros y su cuello, cual si fuéramos novios, con mucha ternura, ella respondía con lentos movimientos para permitir que fuera mas allá dándome entrada hasta la base sus oídos mordiendo un poco los pómulos, aún vestidos acariciando su lindísima espalda con mucho cariño bajaban mis manos hasta sus piernas, eso nos estaba excitando a los dos, ella movía rítmicamente sus caderas haciendo que sus nalgas firmes atraparan mi miembro, poniéndolo mas erecto de lo normal, mis manos seguían adheridas a sus piernas enredados en el liguero recorriendo las piernas mas lindas que recuerde, sus manos me tomaron de la cadera para poder apoyar mejor sus nalgas en mi, sin mover el cuerpo de esta posición volteo la cara hacia mi y con solo una mirada pidió que besara sus labios, sin pensar en nada mas mis labios se unieron a los suyos en un tierno beso que repetimos una y otra ves subiendo la intensidad de las sensaciones en cada ocasión, nuestras respiraciones aumentaron,, en este momento se coloco acostada en la cama yo encima de ella, viéndonos de frente nos besamos nuevamente con mayor intensidad, los alientos se mezclaban, las manos de ambos recorrían el cuerpo del otro, ella tomó mi miembro que para ese momento estaba ya en completa erección, con sus delicadas manos coloco el preservativo y sin demora dirigió mi miembro hacia su intimidad, coloco la punta justo en la entrada de su raja, pude sentir un intenso calor que emanaba de ella, esta sensación me hizo retroceder un poco, me tomo por la cadera y me jalo hacia su cuerpo, su lubricación era evidente, mi miembro comenzó a invadir su cuerpo con lentitud, yo no quería apresurarme y que esa sensación terminara pronto, era exquisito sentir como sus pliegues se separaban para permitirme entrar
+con calma preciosa que tenemos mucho tiempo aun
*lo se pero no puedo esperar mas, no se que fue lo que hiciste pero necesito sentirte en mi y eso es poco común
Estas palabras me hicieron sentir que la sangre me hervía, debía sonrojarme tal ves, no lo recuerdo, mi atención n estaba centrada en otros menesteres, su comentario solo alentó a que fuera mas rápido y calve todo mi ser en el de ella en un solo movimiento, ella dio un pequeño gemido, sentí la necesidad de detener esa en vestida, pero con sus manos en impidió que retrocediera, al contrario separo un poco mas sus piernas, elevo la cadera para poder internarme mas en su deliciosa raja, así lo hice hasta tocar el fondo, me abrazo con fuerza y nuestros labios se unieron nuevamente
*no te muevas por favor, quiero acostumbrarme a ti
Mis manos aprovecharon el momento para acariciar sus senos, después fue mi boca quien se apodero de ellos, tenia unos pezones hermosos y rosados que permanecían erectos ante cada caricia, el aroma de su cuerpo mezclado con el tenua perfuem qu usaba era embriagante hacia que me hundiera mas en aquellas sensaciones que solo fueron interrumpidas cuando su pelvis comenzó a moverse lentamente, era la señal inequívoca de que estaba lista para comenzar, comencé a retroceder lentamente, mi miembro reconocía el frío del ambiente y quería regresar a su cálido encierro, me interne con lentitud y repetí la maniobra en varias ocasiones hasta que nuestros movimientos se sincronizaron, era como si hubiera un entendimiento innato del cuerpo del otro, nos acoplábamos a cada paso hasta acercarse a la perfección, había olvidado ya la naturaleza de nuestro encuentro, los tiempos pactados y los compromisos se habían ido ya, había sinceridad en lo que hacíamos y nos entregábamos el uno al otro sin ningún prejuicio y restricción, nuestros movimientos eran incesantes, nuestras manos remolinos que asediaban un cuerpo ajeno, las respiraciones no podrían ser mas agitadas aun, la penetraba con la mayor intensidad posible a lo que ella respondía inmediatamente con gemido, el oírla me excitaba mas y arremetía nuevamente, parecía leer su mente, se notaba en su rostro lo complacida que estaba, en cierto momento vi que su cuerpo empezó a llenarse de un tenue sudor que cubría toda la piel, sus mejillas se enrojecían se aferro a mi cuerpo, gemía mas a cada momento pude sentir un calor intenso de su entrepierna seguido de un liquido claro que mojo nuestros cuerpos, sabia que estaba ella en pleno orgasmo, una de sus manos me tomo por la nuca, mi cara se interno entre sus pechos haciendo que su aroma llenara mi mente por completo, mis acometidas fueron aun mas intensas mientras que seguía oyendo sus gemidos de placer, estaba a punto de terminar en ella, pero la escuche decir entrecortadamente
*así papito, nene sigue por favor, me encanta lo queme das
Esas frases me llenaron de orgullo y de poder, me interne a fondo en su cuerpo y me quede ahí unos segundos, dejando que disfrutara plenamente de su orgasmo, sentía en mi miembro sus palpitaciones, permanecí ahí inmóvil hasta que estas cesaron, empuje un poco mas y las palpitaciones regresaban, seguí castigándola así algún tiempo.
Me retire de su cuerpo lentamente hiso una mueca de desaprobación, definitivamente no quería dejarme ir, me arrodille sobre la cama, la tome de los brazos y la traje hacia mi, ella entendió el mensaje , cambio mi preservativo y de inmediato tomo la misma posición no sin antes colocar mi miembro en su tibia vagina, sus brazos se entrelazaron por encima de mis hombros y tímidamente me beso de nuevo, en estos momentos pedía mi aprobación para dejarla hacer cualquier cosa, la tenia a mi merced, mayor fue su sorpresa cuando vio que era yo quien le pedía permiso para continuar con un lenguaje corporal que ambos habíamos desarrollado, movió suavemente sus caderas haciendo un circulo, mis manos la tomaron por las nalgas y apoyaron ese movimiento, aun seguía agitada por lo sucedido
*y ahora que quieres que haga corazón
+lo que mas me gusta
*dime, soy toda tuya
+quiero que busques tu orgasmo, es lo que mas me excita de una mujer, verla como busca el placer solo para ella
no tardo en aumentar vigorosamente el ritmo, era ella quien buscaba el placer con desesperación, sus movimientos eran violentos haciendo que mi verga fuera a fondo, pronto el vaivén de su cuerpo se convirtió en un incesante brincoteo resaltado por el sonido que producían nuestros vient4res al chocar, su flujo era ya muy abundante, no tardaría mucho en lograr lo que estaba ansiando, la cargue por las nalgas quedando de yo de pie y ella sostenida de mi por sus piernas alrededor de mi cuerpo y mi verga en su interior, comencé darle duras envestidas que se acentuaban por la caída de su propio peso sobre esa verga erecta y dura, su rostro se enrojeció nuevamente y apretando los labios ahogo un grito de placer, sin darle tiempo de nada la acosté en la cama y me apresure a comerle la raja, su vientre se movía violentamente, lamí su interior y su clítoris alternadamente, ella me respondió con un nuevo orgasmo vaciando sus fluidos directo en mi boca, tenia un sabor delicioso y no deje de lamer hasta dejar limpia esa hermosa raja
*detente por favor, ya, ya por favor, no soporto mas, me hiciste venir dos veces seguidas, espera por favor.
No hice caso a sus palabras por que su cuerpo quería mas, la tome de la cintura y la puse de perrito, sin decir mas metí mi verga con fuerza, ella gimió y grito de placer sin cohibirse en lo mas absoluto, la tome por las nalgas y la bobeaba a mi voluntad, con mucha intensidad, por el largo de sus piernas quedaba justo a mi altura y me permitía penetrarla a mi antojo,
*me vengo papito, me vengo otra vez amor aaaaahhhhh
Continúe con mis movimientos lamí y bese su espalda, una de mis manos acariciaba su clítoris para no dejar de provocar esos deliciosos orgasmos múltiples, la otra se aferraba a sus caderas, ambos sudábamos y cogíamos como si en ello se nos fuera la vida, con mi verga apoyada en su pared anterior de la vagina la sensación era increíble, ella se encendió nuevamente
*si ahí papito ahí, si así sigue, sigue
Estaba excitado al máximo ella también lo estaba, sus piernas temblaban y su vagina se contrajo con violencia, un liquido transparente comenzó a escurrir entre sus piernas y un grito desesperado salió de su boca, se estaba corriendo como nunca lo había sentido y yo no podía hacer algo mas que por fin soltar todo mi semen en su interior con bruscas sacudidas de mi verga. Nuestros gemidos se mezclaron y caímos rendidos a la cama que nos atrapaba para dejarnos en un delicioso sueño.
Al despertar, eran las 3 de la madrugada, del servicio había acabado, ella seguía dormida abrazada a mi, la desperté con un beso
+ya viste la hora
Miro su reloj
*si
+creo que el servicio termino
*hace una hora corazón, pero no te preocupes, me quede dormida, eso no te lo cobro
Dijo mientras sonreía dulcemente, me beso en los labios
*oye, sinceramente no eres el cliente mas guapo o el mas atlético que he tendido, pero no se que hiciste que hacia mucho no me sentían sentir así, fue una noche maravillosa y me gustaría devolverte el favor
Al tiempo que se montaba en mi, completamente desnuda, bueno solo cubierta por las medias que increíblemente aun seguían en su lugar. Me miro pícaramente
*esto no te costara nada mi amor, esto es un pequeño regalo de cumpleaños que te quiero hacer
+++¿y no crees que te estén esperando en casa?
***tal vez, ¿pero que no es fin de semana?, se vale llegar tarde a casa los días de antro ¿o no es así?